La plataforma propioceptiva es una tableta basculante que se utiliza para realizar ejercicios útiles para mejorar el equilibrio y el control de la postura. Este tipo de herramienta es, por tanto, funcional a un tipo de entrenamiento real, llamado propioceptivo. Cada vez más utilizado en el gimnasio y también en casa, gracias a la disponibilidad y versatilidad de las herramientas, el entrenamiento propioceptivo tiene numerosos beneficios: desde la recuperación articular y muscular postraumática hasta la mejora del equilibrio y la postura.
Señales propioceptivas
El entrenamiento con la plataforma propioceptiva estimula el sistema neuromotor, creando una condición de desequilibrio y provocando así los «ajustes» de los músculos y las articulaciones para devolver el cuerpo al equilibrio y al eje. Son las señales propioceptivas las que se entrenan y reeducan, que provienen precisamente de las zonas periféricas del cuerpo. En el caso específico de la plataforma, los estímulos propioceptivos provienen de los miembros inferiores. Este tipo de entrenamiento se basa precisamente en una serie de tensiones creadas por ejercicios de carga y descarga, realizados en un plano oscilante como, precisamente, la tabla o el bosu (en la foto) o, de nuevo, un trampolín.
Beneficios
Los efectos positivos del entrenamiento con la plataforma propioceptiva afectan a todas las categorías de deportistas. De hecho, este tipo de herramienta se utiliza tanto en el entrenamiento de deportistas profesionales como en la rutina fitness de aquellos que quieren mejorar el equilibrio y corregir la postura. Son sobre todo los deportistas que se dedican a la ejecución de numerosos saltos, saltos y cambios de dirección, los que se benefician de la plataforma propioceptiva. Pero incluso aquellos que, por motivos de trabajo, se ven obligados a mantener posturas incorrectas durante mucho tiempo (los que trabajan de pie o los que están siempre frente a la pantalla del PC), podrán beneficiarse enormemente de este tipo de ejercicios. Además, la plataforma también se utiliza en la fase de rehabilitación y en las sesiones de fisioterapia, para ayudar a recuperar el tono, el equilibrio y la funcionalidad a quienes han sufrido traumatismos musculares o articulares.
Cómo utilizar
Para entrenar con la plataforma propioceptiva se recomienda la supervisión de un experto. Sobre todo para las primeras veces: una vez aprendidos los ejercicios, será posible continuar el entrenamiento incluso en casa. Es preferible utilizar la plataforma sin calzado, con calcetines o descalzo, precisamente para estimular las señales propioceptivas periféricas. Pero incluso usarlo con zapatos asegura un buen entrenamiento. Algunos programas de entrenamiento prevén la ejecución de los ejercicios en la plataforma con los ojos cerrados, para estimular aún más los reflejos propioceptivos y mejorar el rendimiento del atleta (es el caso del entrenamiento de deportistas profesionales). Los ejercicios más recomendados son los de carga y descarga, especialmente si te estás recuperando de una lesión. Estos movimientos se pueden realizar tanto sentado, apoyando el pie sobre la mesa y girando el tobillo, como de pie, permaneciendo en equilibrio sobre la plataforma primero con una pierna y luego con la otra. Con las plataformas y con los bosu (plataformas propioceptivas blandas), también es posible crear verdaderos cursos ad hoc para aumentar el rendimiento deportivo y tonificar los músculos del cuerpo.