El saludo a la luna no es tan conocido, pero es muy útil al final del día cuando sientes la necesidad de liberar energía. Meditar a la luz de la luna disuelve los bloqueos energéticos y regenera el alma: descubre cómo hacerlo.
Saludo a la Luna: ¿Qué representa la luna?
Chandra Namaskara o saludo a la luna es una asana de yoga particular, que idealmente contrasta con los saludos al sol: se realiza preferiblemente por la noche y ayuda a promover el sueño. Pero ¿por qué saludar a la luna? Allí luna representa la quietud, la caída de la tarde, el silencio, un rayo de luz en medio de la oscuridad que ilumina nuestros ojos y pensamientos. El saludo a la luna nos permite percibir la esencia de la energía lunar, la profundidad de nuestro yo, la magia y los sueños. La luna está ligada a los ciclos de la vida, su forma plena está asociada al proceso infinito de regeneración de la tierra, de hecho se usa para calcular los tiempos de siembra, fertilidad, embarazo y muchas otras cosas que son parte de la naturaleza. Coincide con la purificación, la energía blanca que ilumina la espiritualidad cósmica.
Beneficios del saludo a la luna
El saludo a la luna trae muchos beneficios al cuerpo y a la mente. Esta práctica se puede utilizar para reducir la tensión, aliviar y eliminar pensamientos, reducir el estrés, calmar la mente y bajar la energía del cuerpo. También muy útil para reducir la tensión muscular, dolores de espalda, reactivar la circulación, favorecer el sueño, mejorar la creatividad intuitiva y la capacidad mental.
Cómo saludar a la luna
El saludo a la luna canaliza la energía femenina de la luna y refresca el alma. Debe practicarse por la noche, preferiblemente en presencia de la luna, o cuando sienta la necesidad de encontrar el equilibrio y el silencio. Concéntrate en la respiración y explora con fluidez las posiciones de tu cuerpo durante las poses, entra en el flujo de la vida y en las profundidades de ti mismo. Te ofrecemos 2 secuencias del saludo a la luna.
Secuencia de «Saludo a la luna» sentado
- Namaskara Mudra o postura sentada: sentarse con las piernas extendidas. Lleva los brazos a los costados, coloca los codos debajo de los hombros y las palmas de las manos en el suelo. Estira la columna, cierra los ojos y respira hondo. Quédate durante 60 segundos.
- Ardha Chandra Purvottanasana o posición sentada con los brazos arriba: sentarse con las piernas extendidas. Estira los brazos hacia arriba y mantén las manos en la línea de los hombros o un poco más atrás. Estira la columna y respira profundamente. Quédate durante 60 segundos.
- Ardha Chandra Pashimottanasana o postura de la cabeza a la rodilla: exhala desde la posición anterior y dobla el tronco hacia adelante sin forzar hasta llevar la cabeza hacia las rodillas, estira y relaja los brazos. Quédese de 40 a 60 segundos.
- Paripurna Navasana o Postura del Barco: sentarse con las rodillas dobladas. Inhala, levanta los pies del suelo, lleva las espinillas paralelas al suelo y deja los brazos extendidos junto a las piernas. Equilibra tu peso sobre el sacro. Quédese de 40 a 60 segundos.
- Stambasana o piernas en el aire: acuéstese con la espalda en el suelo. Exhale y levante las piernas y los brazos perpendiculares al suelo. Quédate durante 60 segundos.
- Sarvangasana o postura de la vela: acuéstese con la espalda en el suelo. Lleve las manos a las caderas, inhale y levante la pelvis del suelo y estire las piernas hacia arriba. Ayúdate con las manos e intenta levantar también parte de la espalda. Asume la posición sin forzar. Quédate 60 segundos.
- Halasana o arado: acuéstese con la espalda en el suelo y los brazos a los lados. Exhala, levanta la pelvis y lleva las piernas hacia el pecho, oblígate con los brazos al suelo. Si puede, intente llevar los pies detrás de la cabeza y tocar el suelo con los dedos de los pies. Quédese de 40 a 60 segundos.
- La posición del acelerador: siéntese, doble las rodillas y junte las plantas de los pies, mantenga la espalda recta, ponga las manos en posición de oración y respire profundamente. Quédate 60 segundos.
Repite la secuencia completa 3 veces, respirando lenta y naturalmente durante la práctica.
Secuencia de “Saludo a la Luna” de pie
- Pose de montaña o pose de montaña: ponte de pie, cierra los ojos tómate un momento e imagina que la luna envuelve todo tu cuerpo, quédate con los brazos suaves a los costados y respira profundamente durante 60 segundos.
- Montaña hacia arriba o Pose de montaña hacia arriba: en una posición vertical inhala y levanta los brazos hacia el cielo, junta las palmas de las manos. Respira despacio y quédate de 40 a 60 segundos.
- Pose de media luna o pose de media luna izquierda y derecha: comience desde la postura de la montaña y avance hacia arriba. Exhale y doble lentamente el tronco hacia la derecha, alargue las costillas y la espalda. Inhala regresa al centro e inclina el tronco hacia la izquierda. Repita durante 60 segundos.
- Pose de diosa o pose de diosa: Párese erguido, con los pies separados al ancho de los hombros. Abre los dedos de los pies hacia afuera, ponte en posición de sentadilla de sumo, párate con los tobillos debajo de las rodillas y la espalda recta. Abre los brazos hacia los lados y llévalos a 90 grados, manteniendo los antebrazos perpendiculares al suelo. Tome respiraciones profundas y permanezca de 40 a 60 segundos.
- Pose de estrella o pose de estrella: colóquese en una posición erguida, lleve los pies un poco más separados que las caderas, inhale y abra los brazos a los lados con las muñecas un poco más arriba que los hombros. Cierra los ojos, activa los músculos centrales, respira profundamente y quédate ahí de 40 a 60 segundos.
- Esquina Natural o Esquina Natural Alargada Derecha: tráete a ti mismo ponte de pie y abre las piernas. Gire los dedos del pie derecho hacia afuera y doble la rodilla derecha a 90 grados, manteniendo el muslo paralelo al piso. Manténgase con la pierna izquierda estirada, exhale y doble lentamente el tronco hacia la derecha hasta que el codo descanse sobre el muslo. Extiende tu brazo izquierdo al lado de tu oreja izquierda. Mantenga la espalda recta y mire hacia adelante. Tome respiraciones profundas y permanezca de 40 a 60 segundos.
- Esquina Natural o Esquina Natural Alargada Izquierda: tráete a ti mismo ponte de pie y abre las piernas. Gire los dedos del pie izquierdo hacia afuera y doble la rodilla izquierda a 90 grados, manteniendo el muslo paralelo al piso. Mantente con la pierna derecha estirada, exhala y dobla lentamente el tronco hacia la izquierda hasta que el codo descanse sobre el muslo. Extiende tu brazo derecho al lado de tu oreja derecha. Mantenga la espalda recta y mire hacia adelante. Tome respiraciones profundas y permanezca de 40 a 60 segundos.
- Estocada medialuna derecha o estocada: Párese, empuje su pie derecho hacia adelante y alinee su rodilla derecha con su tobillo. Baje la rodilla izquierda hasta el suelo, colóquela más atrás que la cadera izquierda y coloque el empeine en el suelo. Exhala y levanta los brazos, mantén la espalda recta y mira hacia adelante. Tome respiraciones profundas y permanezca de 40 a 60 segundos.
- Estocada o estocada creciente izquierda: Párese, empuje su pie izquierdo hacia adelante y alinee su rodilla izquierda con su tobillo. Baje la rodilla derecha hasta el suelo, colóquela más atrás que la cadera derecha y coloque el empeine en el suelo. Exhala y levanta los brazos, mantén la espalda recta y mira hacia adelante. Tome respiraciones profundas y permanezca de 40 a 60 segundos.
- Curva de la espalda o media luna: de pie con los pies juntos. Coloque las palmas de las manos sobre las nalgas. Exhala, presiona las manos sobre los glúteos y arquea ligeramente la espalda, mantén la cabeza en la línea de la espalda. Quédese durante 30 segundos, inhale y regrese con la espalda recta. Repita 2 veces.
- Sentadilla Yoga o Malasana: párese con los pies ligeramente más anchos que las caderas. Levante los talones y baje lentamente el trasero hacia el suelo entre los talones. En una posición en cuclillas, presione los codos contra las rodillas y coloque las manos en posición de oración. Estira la columna, respira hondo y mantente así de 40 a 60 segundos.
- Postura de montaña o pose de montaña en oración: Ponte de pie, cierra los ojos, tómate un momento e imagina que la luna envuelve todo tu cuerpo, pon tus manos en posición de oración, relaja los hombros y respira profundamente durante 60 segundos.
Repite la secuencia 3 veces Disfruta de toda la energía lunar que genera el saludo a la luna, encuentra el equilibrio y la serenidad con la respiración y la práctica de las poses. Namasté.