Música y ejercicios: así mejoran las canciones nuestro entrenamiento

Poner la música y hacer ejercicios dejándose llevar por el ritmo de las canciones mejora el rendimiento físico A la mayoría de los amantes del fitness les encanta escuchando música mientras entrenas o corres, pero este hábito realmente hace una diferencia positiva? Sí, las canciones realmente mejoran tu entrenamiento. Así que elige tus canciones favoritas, ponte los auriculares y déjate llevar por el sonido mientras haces deporte. La música cargas, aumenta el rendimiento y le da el empujón correcto para aguantar. Te hace sudar, pero con una sonrisa: así verás resultados en poco tiempo. Muchas veces quisieras rendirte y postergar la tuya rutina deportiva al día siguiente, pero la música contrarresta la pereza interior. Desde el calentamiento hasta los estiramientos, pasando por la tonificación muscular, hasta el cardio, la combinación de música y ejercicios siempre resulta ganadora. Así es como las canciones pueden mejorar su entrenamiento.

Índice
  1. Calentar con música
  2. El estado de ánimo mejora
  3. Te anima a moverte más
  4. te hace mas feliz
  5. Te ayuda a mantener el ritmo.
  6. Acelera tu recuperación
  7. Un buen tipo de distracción.

Calentar con música

Es importante calentar para no lastimarse. Entonces, para sacarle el máximo partido, empieza con uno caminata ligera y aumentar constantemente el ritmo. Dale play a las canciones de ritmo más lento que exudan ligereza y positividad, luego cambia a otras más fuertes a medida que aceleras el paso. Las pistas de música mejoran su entrenamiento y dan rienda suelta a la imaginación, lo que le permite nos vemos en unos meses: refresco, en forma y tonificado, ccomo siempre has imaginado. Tener una actitud positiva y proactiva facilita la consecución de la meta que te has propuesto. Además de marcar el ritmo, cierta melodía o canción de ritmo rápido le trae muchos buenos recuerdos mientras hace ejercicio con una sonrisa. vamos a ver como entonces las canciones mejoran tuyo aptitud física.

El estado de ánimo mejora

Diversos estudios científicos también lo han demostrado: entrena con el adecuado alineación musical literalmente hace la diferencia. Descarga tu lista de favoritos y comienza una selección de canciones que acompañarán cada momento de tu entrenamiento. Allí música es eficaz y afecta tanto a la mente como al cuerpo. Aumenta tu bienestar, mejorando consumo simultáneo de oxígeno e el humor. Incluso puedes dividir las canciones por momentos (calentamiento, ejercicio y estiramiento) y por ejercicio.

Te anima a moverte más

Cuando suena la música, incluso si estás en la oficina, es difícil resistir el impulso de saltar sobre la mesa y comenzar a bailar. El cuerpo se deja llevar por el ritmo. Escuchar canciones a alto volumen, con diferentes sonoridades y contaminaciones, provoca una respuesta contundente que desencadena en tu cuerpo la deseo de moverse. Escuchar The Weekend mientras corres o entrenar con pesas para tonificarte puede ser especialmente efectivo. Te envía el quiero mover, incluso si el físico no quiere. Es una respuesta automática, casi involuntaria pero muy agradable.

te hace mas feliz

todos tenemos uno canción del corazón eso nos hace sentir bien y escuchamos en bucle cuando nos sentimos deprimidos. Estudios recientes sugieren que escuchar la música que amas aumenta la actividad eléctrica en el cerebro, particularmente en aquellas regiones que son esenciales para coordinar el movimiento. También te permite estar más presente y enfocado durante su entrenamiento. Mecerte al ritmo de tus canciones favoritas puede ayudarte escapar de las preocupaciones de la vida y te distrae de los pensamientos negativos. Las notas estimulan el sistema inmunológico y reducen el nivel de estrés, ahuyentando el Malos pensamientos y hacerte feliz.

Te ayuda a mantener el ritmo.

Dependiendo del sonido, la música te ayuda a mantener la ritmo de su entrenamiento. Dicta el tempo de tu sesión de carrera, dándote la cadencia de tu paso y alentándote a acelerar el ritmo o tu impulso para empujar las mancuernas. Sin olvidar que la música afecta al latido del corazón, presión arterial y respiración. También es fundamental cuando levantas pesas: una sesión de tonificación puede resultar un poco aburrida sin una melodía que no te haga pensar en el cansancio de las repeticiones. Cuando te subes a la cinta de correr y empiezas Thriller de Michael Jackson o Firework de Katy Perry inmediatamente sentirás el efecto estimulante en todo tu cuerpo.

Acelera tu recuperación

El ritmo de una canción no solo te pone en marcha, también puede ayudarte a recuperarte. Música con una estructura armónica y melódica simple y un tempo entre 60 y 90 bpm reduce el ritmo cardíaco y permite que el cuerpo se relaje. Un sonido más fuerte tiene un efecto energizante, uno más débil relajante. Después de una intensa actividad de cardio, intenta estirar los músculos con baladas como Girl Crush o Falling de Harry Styles de fondo. Y nunca olvides respirar profundamente.

Un buen tipo de distracción.

Cuando usa audífonos, evita que su mente se dé por vencida porque se distrae con las notas y es menos consciente de cuánta energía le está poniendo. Es como cuando vais de trekking en pareja y os animáis a no rendiros. Allí la música te impide ceder y tiene potencial terapéutico: compite contra esta retroalimentación fisiológica enot te hace pensar en el cansancio. Ya en la antigua Grecia filósofos como Platón y Aristóteles hablaban de su poder.

Subir